Durante años cuando se hablaba de piorrea nos referíamos al hecho de que una persona estaba perdiendo los dientes sanos sin ninguna razón. No sabiendo la causa pues fue desconocida entonces, la única cura era la mera renuncia a tal pérdida.
Afortunadamente desde que se empezó a estudiar la enfermedad a partir de los 70, era posible dar una definición con diferentes clasificaciones (hasta últimos de 1999), incluyendo la etiología (causas y la progresión de la enfermedad), donde se encontró la relación entre enfermedad periodontal y otras enfermedades sistémicas.
Hoy en día no es correcto hablar de piorrea, dicho término se sustituye por: Enfermedad Periodontal, con esa definición es una enfermedad Multifactorial de los tejidos de soporte de los dientes causada principalmente por la placa bacteriana.
Multifactorial significa que intervienen más factores, que son: placa dental, sarro, familiar, genética, tabaquismo, condiciones sistémicas, mal posición dental.
Son los tejidos los que apoyan los dientes y permiten que sean seguros y estables en el hueso alveolar, como: encía, ligamento periodontal y cemento óseo. Así entendemos que el dicho de la frase: «voy a perder los dientes», en cierto sentido sea correcto.
Por ejemplo, es como si quitamos gradualmente toda la tierra de un frasco, en el que los arboles que se encuentran dentro del frasco se empezaran a mover lentamente, cuanto menos tierra tenga el frasco (movilidad dental), hasta su caída (avulsión dentaria).
La principal causa de la pérdida de apoyo es la placa. Consiste en una mezcla de: agregados bacterianos (cerca de 800 especies), proteínas, metabolitos, saliva, alimentos. El peligro de eso es que si la placa se queda demasiado en el diente, esta migra dentro del surco gingival y las bacterias inician un proceso de reabsorción de tejido irreversible.
La microbiología de la placa dental llevó a cabo importantes investigaciones y ha llegado para estudiar la especie más patógena, es decir, más bacterias implicadas en la destrucción del periodonto y del hueso.
Los estudios realizados en las últimas décadas nos han permitido entender las causas para encontrar terapias necesarias (higiene de los locales, remoción profesional de placa bacteriana, tártaro y uso de antibióticos antimicrobianos a la cirugía periodontal, para detener o al menos ralentizar el proceso degenerativo de las enfermedades periodontales.