Junto con las caries y los problemas periodontales, la maloclusión dental en niños es un problema muy habitual en la salud bucodental. Es fundamental acudir a revisiones para poder tratarlo a tiempo antes de que suponga un problema mayor. En este post hablamos sobre las causas más comunes y tratamientos que se deben seguir en caso de ser diagnosticado de maloclusión infantil.
¿Qué es la maloclusión infantil?
La maloclusión dental es uno de los problemas más habituales en salud bucodental según la Sociedad Española de Odontopediatría junto con las caries y los problemas periodontales. La maloclusión dental en niños es, por lo tanto, una alteración bastante común. Por eso es fundamental tratarlo desde una edad temprana.
Se trata de una posición inadecuada de las piezas dentales, que produce una aceptación incorrecta entre las mismas al cerrar completamente la cavidad bucal. Lo ideal es que los dientes superiores cubran ligeramente a los inferiores al cerrar la boca, cuando esto no sucede y la mandíbula o los dientes presentan una alteración que afecta a la posición de los dientes superiores e inferiores, estamos ante un caso de maloclusión infantil.
Esta patología afecta a las funciones de la boca de los niños y puede generar alteraciones estéticas.
Tipos de maloclusión dental infantil
Un odontólogo especialista diagnostica la maloclusión dental infantil a través de un examen dental y radiografía o estudios de modelos de la boca. Una vez identificada la presencia de esta patología, se puede clasificar según el tipo o gravedad para poder comenzar el tratamiento más adecuado. Podemos diferenciar tres clases de maloclusión dental en niños.
Clase 1
La primera clase de maloclusión dental infantil se da cuando los maxilares superior e inferior se relacionan de forma correcta, pero las piezas dentales se colocan en posiciones incorrectas. Esto provoca sobremordidas, diastemas o apiñamiento de los dientes.
Se puede dar el caso de que, a nivel óseo, los dos maxilares se encuentren en la posición correcta o que estén ambos adelantados, sería el caso de la biprotrusión, o atrasados.
Clase 2
Este tipo de maloclusión infantil se produce cuando el maxilar superior se encuentra adelantado respecto al maxilar inferior. Se puede dar por dos casos: que el maxilar superior esté en su posición correcta y la mandíbula retraída o porque el maxilar superior está adelantado y la mandíbula en su posición natural. También puede ser el caso de una combinación de ambas opciones.
Es fácil identificar este tipo ya que los dientes superiores suelen estar muy adelantados o sobresaliendo en exceso al cerrar la boca.
Está fuertemente ligada con los hábitos infantiles de succión de dedo, uso prolongado de chupete y biberón o respiración bucal.
Clase 3
La maloclusión dental tipo 3 es aquella en la que el maxilar inferior está adelantado con respecto al superior. Cuando la mandíbula sobresale hacia delante se conoce con el nombre de prognatismo.
Este tipo de maloclusión es menos frecuente en niños y es de las más difíciles de tratar. Detectarlo a tiempo y poder iniciar el tratamiento desde una edad temprana es clave para corregir este problema.
Causas de la maloclusión infantil
Como hemos indicado, la maloclusión en niños es muy frecuente y se manifiesta desde edades muy tempranas. Una malformación en el proceso de crecimiento, la salida de las piezas dentales o algunos malos hábitos son algunos de los motivos por los que aparece esta alteración.
- Una de las causas de la maloclusión dental infantil es hereditaria. Es una condición genética que se transmite y hace que los miembros de ciertas familias presenten ciertas alteraciones en la formación de la mandíbula.
- La succión nutritiva de lactancia materna o uso del biberón en un período más prolongado del habitual pueden favorecer una malformación que dé lugar a la maloclusión infantil.
- El uso de otros tipos de succión como el chupete o el dedo, después de los dos años de edad, es la causa de maloclusiones en ciertos niños.
- Malos hábitos al morder, la respiración bucal o morderse las uñas también pueden terminar en la formación de maloclusión dental infantil.
- La pérdida prematura de los dientes de leche por caries, traumatismos o infecciones también pueden derivar en este tipo de alteraciones.
- Otras afecciones como el labio leporino, paladar hendido, tumores en la cavidad bucal, dientes ubicados en posiciones anormales o traumatismos propician la alteración de la posición de los dientes que puede dar lugar a la maloclusión dental en niños.
La detección de este tipo de alteraciones mandibulares y dentales en una edad temprana es clave. Por esa razón, desde Clínica Dental Jorge Mato recomendamos realizar revisiones periódicas para poder identificar este tipo de patologías en los más pequeños a tiempo y así poder corregirlas. La maloclusión dental en niños es habitual pero, si se detecta a tiempo, es fácil de corregir.