Los estudios clínicos han demostrado la existencia de una correlación entre la enfermedad periodontal, riesgo de prematuridad y bajo peso al nacer inferior a la media.
Las mujeres embarazadas ya saben cuál es su nivel de salud general que es crucial para el estado general del feto, pero algunos pueden no saber cómo la enfermedad periodontal es capaz de alterar la salud sistémica, influyendo así también la salud del feto.
Esta relación comenzó a tener sus primeros cimientos de la medicina ya antiguamente, cuando se curaba el llamado «dolor de muelas de la embarazada«.
Un porcentaje muy alto de las mujeres en el embarazo se ve afectada por la gingivitis, de una intensidad variable, que es más probable en relación a las condiciones de las encías antes del período de embarazo y la disminución de las defensas inmunitarias.
Los tejidos inflamados pueden progresar a la hiperplasia (aumento de volumen) y traer consecuencias tales como sangrado de las encías, dolor o aumento de la formación de cavidades profundas (el espacio entre la encía y el diente de la enfermedad) y la movilidad de los dientes.
Las zonas de la cavidad oral más afectadas y en riesgo son aquellas que se encuentran en los espacios interproximales. La aparición de las lesiones periodontales es frecuente durante el segundo y tercer trimestre del embarazo.
Parece que la asociación entre el embarazo y la inflamación de las encías puede conducir a un aumento de la placa y la consistencia de este último. El estradiol y progesterona (hormonas femeninas), cuyo nivel puede aumentar en comparación con el ciclo menstrual, son factores de crecimiento de ciertas bacterias pueden alterar la salud gingival.
Para confirmar esto se encontró que después de tres meses después del parto, cuando las hormonas vuelven a la normalidad, hay una remisión de la gingivitis.
Los estudios clínicos han medido la profundidad de las bolsas de las encías en las madres de los niños y en madres de niños con bajo peso y han llegado a la conclusión de que existe la posibilidad de que la infección se transmita al tracto genital y urinario y que este influye en el resultado del embarazo. Un alto nivel de toxinas producidas por las bacterias y la mediación de prostaglandinas y la interleucina, moléculas producidas por la madre durante el proceso de la inflamación, podría constituir un insulto suficiente para estimular el caso de un parto prematuro (alrededor de 37 días antes).
Esto demuestra lo importante que es el período de visitas dentales, de un diagnóstico de gestación, sesiones de higiene bucal profesional y una correcta higiene bucal en casa. Para cualquier información puedes ponerte en contacto con tu dentista y tu higienista dental que sin duda le darán todo el apoyo necesario.
