Llegan esas fechas en las que los niños empiezan a ser los protagonistas de todos estos eventos y uno que se ha sumado a ellos es la fiesta de Halloween.
Después de Halloween las caries en los más peques de la casa aumenta un 30% debido a que los padres dan carta blanca para un consumo excesivo de dulces, eso sumado a malos hábitos de higiene bucal produce un mayor aumento de caries en los niños después de esta fiesta.
Los dulces tienen una cantidad de azúcar muy alta, y su descomposición es más rápida y fácil, lo que desmineralizan los dientes y forman las caries, sobre todo los caramelos y los chicles, que al mascarlos liberan toda su azúcar.
Los padres no suelen tener muy en cuenta las caries que se forman en los dientes temporales pero son tan importantes como las que se forman en los dientes permanentes, ya que solo se cae la corona, porque la raíz es reabsorbida por el diente permanente. Entonces, si hay caries, se reabsorbe con todo, hay un 80 % de posibilidad de que esos dientes salgan con caries desde el nacimiento de la pieza definitiva.
Las caries son producidas por la placa bacteriana, se produce cada 20 minutos, y en la noche se proliferan por las bacterias aerobias (respirar por la boca), desgastando el esmalte, la dentina y posteriormente el nervio, ocasionado lesiones.
Recomendamos que después de ingerir chucherías hagamos una limpieza de al menos dos minutos con el cepillo y una pasta dentífrica especifica para los más pequeños, que contenga algo de flúor y recomendada para su edad.
Disfrutar de esta fiesta es algo bonito con los niños, pero recordar mantener la higiene después del atracón de chuches.