Las enfermedades bucales, la caries dental y la enfermedad periodontal son las enfermedades más frecuentes y a las que menos importancia se les da.
La caries dental se estima que es la primera enfermedad mas sufrida por su prevalencia, puesto que cerca de 5 mil millones de personas se encuentran afectadas.
Incluso hoy en día en muchos países como Albania, Bosnia, Bulgaria, Canadá y Finlandia más del 40% de la población adulta esta desdentada y carece de todos los dientes, debido a estas enfermedades.
Una cifra aún más preocupante es el aumento de la enfermedad de la caries especialmente en niños en más de un 15%, en los últimos cinco años.
Desde hace tiempo se venía advirtiendo del problema de caries tan grande que se estaba presentando en los niños con edades comprendidas entre los 4 años con un 21,6% de niños con caries y los niños de doce años de edad de los que alrededor del 43,1% de niños tiene caries.
Si evaluamos los datos relacionados con la caries en adultos de edades comprendidas entre 19 y 25 años, la prevalencia es superior al 80%. Estos números hablan por sí mismos.
¿Pero por qué ha pasado esto? En primer lugar por la gran desinformación sobre la importancia de la salud oral desde las primeras etapas de la vida.
También llevar un estilo de vida inadecuado, una mala alimentación, la ingesta de demasiados hidratos de carbono, son las principales causas de la enfermedad de la caries que también afectan el riesgo de obesidad de nuestros hijos.
A esto se añade que sólo el 39,7% de la población española en el último año fue al dentista o el 5,4% de los hogares españoles.
También son alarmantes las cifras de la desinformación hacia la enfermedad periodontal. Esta enfermedad afecta a más del 60% de la población, pero sólo el 10% reconoce que se trata de una enfermedad de los tejidos que sostienen a los dientes. Además, sólo un tercio de los españoles saben que la enfermedad periodontal podría prevenirse con controles periódicos por el odontólogo y el higienista dental.
¿Qué podemos hacer? La respuesta es tan obvia que puede parecer hasta trivial.
Información, prevención, motivación, son el principio para acabar con este tipo de enfermedad.