El mundo de la odontología es mucho más amplio de lo que podemos imaginar. Y este crecimiento del sector abre muchas puertas para los profesionales que buscan una especialidad a partir de lo que podríamos llamar «tradicional».
Así como en la odontología, el deporte va ocupando cada vez más espacio en nuestro día a día. El atleta, profesional o amateur, para llevar a cabo la práctica de la actividad física, necesita recibir un mejor cuidado en su salud corporal, necesitando dar una atención especial a su salud oral.
Este cuidado puede ser una gran diferencia entre un mínimo de rendimiento competitivo o alto en muchas actividades deportivas, por lo tanto, la salud oral tiene un impacto significativo en el rendimiento deportivo.
Un dentista experto en este campo, tiene que trabajar fuertemente con lo que es el cuidado preventivo y por lo tanto, debe estar en constante alerta sobre los nuevos estudios que muestren posibles problemas dentales que afecten a la salud general del atleta.
El diferencial de un especialista en la odontología deportiva es que su trabajo va mucho más allá del cuidado oral. Hay que entender y saber cómo un simple dolor muscular puede conectar directamente con un problema dental.
El atleta que busca un alto rendimiento, debe entender que la preservación de su salud dental es de suma importancia para lograr los resultados esperados. Un estudio muestra que el 22% de la disminución del rendimiento está asociado a los problemas de salud oral.
De acuerdo con el presidente de la CFO, Ailton Morilhas: «Queremos proteger a las personas que al día de hoy buscan tener más salud, haciendo más ejercicio, especialmente para las personas en las que el deporte es su profesión. Hay que recordar que la salud general de todos depende mucho de nuestra salud oral.»
Por lo tanto, la odontología deportiva tiende a tener un gran crecimiento en el mercado y en un futuro próximo se requerirá de profesionales capacitados para realizar esta función.
